Implacables pulsos de sintetizador, demoledoras baterías electrónicas y una línea de bajo arenosa y distorsionada forjan un paisaje sonoro industrial de alto octanaje. Este tema ofrece una inyección pura de adrenalina, perfecto para escenas de acción intensas, videojuegos competitivos, montajes de deportes extremos y promociones tecnológicas agresivas.